La población de Leona Vicario tuvo su origen en el año de 1902, al poco tiempo de la creación del Territorio Federal de Quintana Roo. En ese entonces este lugar era conocido como la Hacienda de Santa María que surgió a partir una concesión otorgada por el gobierno para la explotación del chicle y el palo de tinte.
En 1936, la hacienda de Santa María fue renombrada como Leona Vicario, en honor a la heroína de la Independencia de México. En este tiempo la goma de mascar fue mundialmente conocida como un remedio para mitigar la sed, para limpiar la dentadura y contra el estrés. Este producto tuvo una gran demanda al inicio de los fenómenos bélicos que sacudieron al mundo, y fue así como la población de Leona Vicario fue aumentando mientras salía del país la producción de chicle y de maderas preciosas.
Lamentablemente, al término de la Segunda Guerra Mundial en 1945, la producción chiclera decayó dejando a los pobladores de la región sin empleo. Sin embargo, las personas de este lugar ya habían formado familias y hogares. Al ser una población tan bien asentada, no desapareció. Sus caminos, actualmente nuestras carreteras, ya estaban trazados y fue así como la principal producción económica pasó a ser la actividad agropecuaria.
Leona Vicario, una de las poblaciones más antiguas del estado de Quintana Roo, muestra la valentía de la gente para sobrevivir en un medio hostil, sin vacunas y con un promedio de vida bajo. Si bien en un inicio formó parte del Municipio de Benito Juárez, desde el año 2015 pasó a ser la principal población de la zona rural del Municipio de Puerto Morelos. Desde que la “fiebre del chicle” terminó, esta localidad ha ido dando tumbos tanto en los mapas como en las actividades económicas.
Por fortuna, actualmente las personas de Leona Vicario tienen una oportunidad para desarrollarse y formar parte de la producción económica que se da gracias a las maravillas naturales de la península. Actualmente, la Ruta de los Cenotes, descubierta por los campamentos chicleros, es un atractivo natural que ha dejado ganancias por medio del ecoturismo.
Por otro lado, las poblaciones rurales han ido en aumento y el turismo no siempre puede abastecer a las personas de estas regiones. La solución, según lo vemos, es dar independencia a estas comunidades por medio de la producción interna y el consumo local.
Un buen ejemplo es la empresa inmobiliaria Lu’um Ha, que busca el desarrollo económico de la región y para la conformación de todas sus secciones (Iik’, K’aak, Ja’ y Kaab) han dado empleos a todas esas personas. Además, en el futuro, por medio de la reactivación de las inversiones en terrenos, se pretende que existan trabajos fijos para toda esa gente en estas zonas comerciales.
Comments